En Asturias tengo un pequeño jardín y desde siempre nos ha dado por intentar plantar cosas de Canarias. Parece difícil por la diferencia de clima, pero no es tanto.
La Jacaranda por ejemplo se da de maravilla. En la foto (que saque esta mañana) ya esta sin flor, pero ha estado a reventar. Su flor es azul
Las plataneras las tengo hace miles de años; no hay problema, mueren cuando dan la piña y sale un hijo al lado. Lo difícil es que den plátanos. Resultan bastante decorativas.
Alguna vez dan una mini piña de plátanos, pero no llegan a madurar o a tener tamaño como para comerlos.
Solo que salga me presta.
Es una planta que sufre mucho con las heladas.
En nuestro empeño por aclimatar cosas aquí, llegamos a plantar pepitas de aguacate, pero nunca se dio nada. En vista de eso nos trajimos dos aguacateros, ya crecidos, de Canarias.
Crecidos e injertados pues dicen que si no es así no dan fruto.
Vinimos con ellos en el avión. Eran otros tiempos y no pusieron pegas; la azafata los acomodo donde pudo.
No tuvo tanta suerte la sobrina del de siempre cuando trajo su traje de novia en mano desde Londres. La azafata y personal del avión le decían que tenía que facturarlo, lo que no quería hacer para que no se le arrugara.
Tuvo que discutir y los pasajeros se pusieron de parte de ella:
- Que la chica traiga su traje de novia, no fletaría más.
Y le llego perfecto.
Pues han pasado más de 20 años desde que plantamos los aguacates. Uno feneció, el otro año tras año y no dio nada.
Lo dimos por imposible.
Y este año "milagro" una visitante nos dice:
- Veo que tenéis aguacates.
- Si pero no dan nada.
- Pues yo estoy viendo algún fruto.
Efectivamente, no tiene uno, tiene por lo menos diez hermosos aguacates.
No se si llegaran a ponerse en sazón. pero ahí están.
Nos hizo ilu.
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