¡Ay Perlora!
Nunca había estado dentro, siempre la veia al pasar de lejos y no había tenido la curiosidad suficiente para entrar a verla.
Y esta muy a mano de Gijón, no debe llegar ni a 15 kilómetros.
Se ubica en el Concejo de Carreño, al lado mismo de Candas, en el Principado de Asturias.
Vio la luz en el año 1.954, con aportaciones de empresas y sindicatos, como ciudad residencial de veraneo para empleados y obreros de dichas empresas.
Mayormente de la administración y de servicios públicos.
Lo que no se es si era gratis total o había que pagar algo. Las estancias de 15 días.
Pues con mi hermana Magui y Ambrosio me plante allí este verano.
Cuando entramos no se veía un bicho viviente.
- Parece abandonada digo.
- Se ven algunas cortinas dice Magui.
Lo que si se veía era un descuido total en casas y jardines.
En sus tiempos de explendor tenía un hotel para 90 personas, 273 chales, iglesia, hospital pequeño, peluqueria, cine, bares, dos comedores........etc.
Todo ello atendido por 250 empleados.
Lo del comedor muy cómodo pues no tenías que que cocinar.
Situada a 20 metros sobre el nivel del mar se ve esta vista. Candas al fondo.
También contaba con piscina, mini glof, bolera.....todo tipo de instalaciones deportivas.
A sus pies la playa de Huelgues.
Los turnos se establecian a traves de sorteo y había tiros para conseguir plaza.
Bar encima de la playa igualmente abandonado. Por lo menos ese día no estaba abierto.
Una pena de lugar.
El hotel se derribo en el 2.005 y cerro definitivamente sus puertas en el año 2.007.
Y alli estan 273 chales abandonados.
No lo puedo entender.
Desde que empezo la democracia, mas o menos, es propiedad del Principado.
Y asi esta como una ciudad fantasma.
He leido algunos blogs de personas que estuvieron allí en sus vacaciones correpondientes y lo recuerdan como algo maravilloso.
Tengo la sospecha, solo sospecha, que como era obra del franquismo los progres no lo tomaron con mucho interes y eso que estaba dedicada a los trabajadores.
Mentalidad estrecha que tiene el personal. He visto lo mismo con otras cosas de esa época. Lo dejan morir.
Y da dolor ver tanta casita sin habitantes. Y lo peor es que acabara por deteriorarse del todo. Todavía tiene solución.
El lugar me parecio precioso, pero sali con cierto desasosiego de allí.
Espero que pronto le vuelvan a dar el uso que tuvo siempre o por lo menos que lo privaticen antes que dejar que se desmorone completamente.
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